
El paisaje era nuevo para ella, totalmente desconocido.
Incluso el marco de aquella ventana le hacia añorar las ventanas por las que entraba su gata cada noche
No se sentia mal, solo un poco confusa ya que no habia tenido tanta soledad en su vida.
Todo lo que quisiera hacer, porfin tenia las puertas abiertas para hacer las cosas a su manera...sin embargo, ¿por donde debia empezar?.
En el avion antes de despegar, las cosas no se veian tan abrumadoras como ahora.
Aquel frio tan extraño al calor de su pais la mantenia con calma...hasta que salio del shock en que estaba y dejo que sus maletas resbalaran de sus humedos dedos cayendo al piso y junto con ellas una lagrima que casi se congela en su mejilla.
Ni ella misma sabe porque sentir miedo. Habia anhelado mucho este viaje y despues de todo estaba agotada de como transcurria su vida; monotonia. Esperando algo que nunca llegaria. Hasta ahora hasta este preciso momento.
Su corto cabello color chocolate estaba erizado por la humedad, sus ojos hinchados de dormir en el avion le picaban y nublaban la vista y su humor no era muy refrescante.
Siempre fue entusiasta.Basto con un poco de su musica preferida, una ducha sin marcadores, una afeitadora, una plancha, delineador y pintura roja para subir su animo. Si su ultima pareja la hubiese visto se hubiese sentido afligido...como siempre.
Encendio un cigarrillo y se sento junto a la ventana.Aun no sabia porque se habia arreglado, no tenia planes, no conocia a nadie, ni en donde podria encontrar un lugar para distraerse. Pero no se iba a dar por vencida.
Decidida se adentro a lo desconocido. Salio con firmeza y seguridad, un poco emocionada de hecho y justo antes de cruzar la calle se desborono. Subio destrozada y lloro una vez mas frente a esa estupida ventana. No sabia la razon de su llanto, solo era una ballena varada en el final de la primavera.
· · ·
La noche no prometia nada bueno para esta joven.
La esperaban en aquel local destroza almas, pero, ya estaba agobiada de que nada nuevo pasara pero era mejor tener lo mismo que nada.
Su chaqueta, desamarrar su cabello dorado y salir disparada de su pequeña prision.
La calle estaba mas tranquila que de costumbre, la noche no habia empezado a destrozarse aun. Le disgusto olvidar su ipod pero ya no valia la pena regresar.
Cruzando la calle un auto apresurado salpico en ella barro y sabra el de arriba que otras mierdas
-Asshole...-
Se ahorillo en las escaleras de un edificio a limpiarse. De peor humor y sin entusiasmo encendio un cigarrillo y espero la nada.
Un llanto muy leve comenzo a adentrarse en su cabeza irritandola mas, y por algun u otro motivo, quizas solo el destino, necesito saber de donde provenia.
En un piso bajo y con poca luz encontro a la chica de la ventana y una sonrisa se asomo en su cara, porfin su noche tuvo un buen cambio
· · ·
No habia ni empezado bien su lamento sin motivos cuando tomo un respiro para entender que demonios le sucedia, se levanto subitamente y seco sus lagrimas.
-Solo es un cambio, falta de costumbre...-
tomo sus llaves y tocaron la puerta.
Una chica extraña, al parecer local le sonrio extendiendo su mano, le ofrecio su nombre y un gesto que comprendio como "vamos".
Desde ahora solo lo veria como 7 meses para reir.